Mirar por la ventana

De: mateocabello

01 02 am

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Categoría: Fotografía

1 comentario

Apertura:f/5.6
Distancia focal:100 mm
ISO:100
Obturación:1/0 segundos
Cámara:Canon EOS 350D DIGITAL

El encabezamiento que preside Nocturlabio es «caminar, viajar, mirar por la ventana». La fotografía con la que abro 2012 pertenece a esta última categoría, a la de mirar por la ventana: ese espacio donde habitamos en nuestro día a día…  y que a pesar de ello no está exento de imagénes fantásticas. Más bien al contrario, está repleto de ellas, sólo que la mayor parte del tiempo nos movemos demasiado deprisa como para apreciarlas.

Con esa idea en la cabeza me asomé a Granada estas Navidades: nada de sacar imágenes de la Alhambra de noche o de rinconces fantásticos en el Albayzin o el Sacramonte, sino zambullirme en la vida cotidiana de la ciudad, por donde vive y transita la mayor parte de la gente y buscar imágenes extraordinarias. Tengo que decir que el tiempo me ha ayudado mucho: las últimas veces que había estado en Granada había llovido un montón y había habido un día gris detrás de otro. Este año, afortunadamente, ha lucido un sol radiante, gracias a lo cual he podido disfrutar de una de las cosas más estupendas de mi ciudad, que es su luz acaramelada y cálida.

Entre mis no-ocupaciones de estos días, una de mis preferidas ha sido buscar espacios donde hubiera una luz bonita. Todos los días me he pateado las callejuelas del centro de la ciudad en busca de espacios de luz donde ver pasar tranquilamente la vida de la ciudad y sus gentes. Por una vez ha sido muy agradable no tener prisa, no ir a ninguna parte, y poder simplemente mirar y remirarlo todo con calma. Sentirme de nuevo como un estudiante haciendo novillos en una mañana fría de invierno, sin ninguna obligación más que la de sacarle el mayor partido posible al tiempo y la libertad recien adquiridas.

La imagen está tomada en la Alcaicería. Como ya me han «regañado» otras veces, no voy a destripar la foto explicando porqué he escogido a este señor y no a otro, o porqué este encuadre y no tal otro… Que cada uno la vea con sus propios ojos… Pero si me gustaría llamar la atención sobre un pequeño detalle: el señor se está guardando un tallito de romero en el bolsillo de su chaqueta… Y esto, que podría parecer algo insignificante, nos dice muchísimo acerca de la foto…

El hecho de que el señor se esté guardando un ramito de romero en el bolsillo es señal de que apenas unos segundos antes había sido «asaltado» por una de las gitanas que hacen de la Alcaicería su zona de caza de turistas. La escena no hace falta que me la imagine, porque yo mismo la he vivido mil millones de veces, y ese día en particular otras tres o cuatro. Gitana mayor te ve con cámara al hombro y te dice, mostrándote el romero «ven pa cá, guapo, que te voy a leer la suerte». Tu dices amablemente «no, gracias, señora» a lo que la gitana responde «pero si es graaaatis, guapo, ven pa ca, que con esos ojazos que tienes te voy a leer la mano». Ahí pueden pasar dos cosas: que seas un turista incauto y que te acerces, en cuyo caso la gitana te leerá la mano, te dirá cuatro cosas típicas, y te pedirá seis euros al acabar, o bien que le digas a la señora la frase mágica para que te deje en paz «no, gracias, señora, si soy de aquí, de Graná»… en cuyo caso ya no te volverá a molestar más.

Está claro que el señor era un pobre turista incauto… de ahí su sonrisa mientras se guardaba el romero en el bolsillo…

Un comentario el “Mirar por la ventana”

  1. Yo también estuve en Graná y vi desde allí nacer el Año Nuevo… Tiempo fantástico, ciudad hermosísima… 🙂


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