El poder de transformación de la fotografía

De: mateocabello

07 27 pm

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Categoría: Fotografía

9 comentarios

Apertura:f/5.6
Distancia focal:80 mm
ISO:800
Obturación:1/0 segundos
Cámara:Canon EOS 350D DIGITAL

Cuando vivía en La Paz, mis padres vinieron a verme un mes de Junio. Incluso recuerdo que coincidió con la fiesta del Gran Poder. Como es normal, hicieron millones de fotografías. Mi madre incluso tiene fotos en las que sale rodeada de mineros durante una manifestación. El caso es que yo no vi las fotografías hasta pasados unos meses cuando volví a Granada por Navidad (era la época previa a las cámaras digitales y las fotos todavía se llevaban a una tienda a revelar).  Nunca se me olvidará la impresión que me causaron: a pesar de que yo llevaba viviendo en La Paz casi dos años, la ciudad, vista en fotos, me pareció completamente nueva, como si la viera por primera vez. Y no solo eso:  La Paz en las fotos estaba preciosa, muchísimo más bonita que al natural. Pero mucho más. Recuerdo estar viéndolas como embobado diciendo «…pero, ¿donde está esto?… Y esto otro, ¿qué es?…»

(Llegados a este punto es necesario mencionar que La Paz no es precisamente una ciudad muy bonita del mundo. Para mi es un lugar terriblemente especial, de los más especiales que hay… pero bonita, en el sentido de bonita, la verdad es que no lo es…)

Creo que fué en ese momento cuando descubrí por primera vez esa cualidad mágica de la fotografía: la capacidad que tiene para embellecer las cosas más cotidianas. Y no sé porque ocurre. Supongo que con las fotografías se captan detalles que están ahí, pero a los que no les prestamos ninguna atención. Estamos rodeados de belleza que sin embargo normalmente nos pasa desaperciba

La foto que pongo aquí hoy  tiene la cualidad de mostrar las cosas bajo una perspectiva diferente… esto no es más que un pupitre en una biblioteca, con un par de sillas normales y un radiador detrás. Un rincón más como otros quinientos en la misma biblioteca… Visto en directo, no tiene absolutamente nada de especial… Y sin embargo en la foto queda bonito…

9 comentarios el “El poder de transformación de la fotografía”

  1. Pon alguna foto de La Paz, Mateo…Que mucho hablar que si es esto o aquello pero para ser consecuente con lo que dices, pues una foto es lo que toca. Muchos saludos desde Mancora (Peru)…si tuviera tiempo, fotos no me faltan, pero es que estos dos niños no me dejan tiempo ni para tomarme una chelita…

  2. César… te aseguro que el día que vuelva a Bolivia, no me quitarán la cámara de las manos ni con agua caliente… y pondré muchas fotos por aquí… pero intento que la mayoría de fotos que pongo aquí sean nuevas… así que ya sabes: la mejor forma de tener fotos de Bolivia en este espacio es que me invites pronto a pasar una temporadita en La Paz… y quizás no con una chelita, pero si que con unas salteñas de por medio, hablemos de lo divino y lo humano… Un abrazo, compañero!

    • Epa, asi se habla. Invitados estais, de eso no tengais duda alguna. Tu diras de que quieres la salteña, de pollo o de carne…Lastima que aqui en Peru no hayan invitado la salteña de mariscos, hay que investigar por que. Cuidate mucho y sigue con esas fenomenales fotos!!!

  3. Sí, queda bonito porque parece que donde hay más luz es donde estará el libro en tus manos, en ese rinconcito. Y será un momento único y mágico del día, calentado por el sol….

  4. Excelente fotografía. Todas lo son, pero esta especialmente. Mis felicitaciones. Gonzalo Iturmendi Morales.

  5. …. algo que al natural pasa tan desapercibido pero que es maravilloso en una foto. Como dice Gonzalo «excelente fotografía». enhorabuena!

  6. Como dice Gonzalo, todas las fotos son excelentes. De esta me gusta que algo ordinario lo has convertido en extraordinario.

    • La magia de todo esto es que cualquier lugar, por sencillo que parezca, es el centro del mundo y la felicidad. La imagen captada, su aro luminoso, vencedor de la noche, te escribe con letra firme un mensaje personal. Su foco es algo especial, brilla en la oscuridad por encima de otras luces. Creo que no importa la luz de la imagen, sino la que vemos, la que permite desvelar nuestra mirada. En aquel lugar, si te fijas, apreciarás el resplandor del tiempo.


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